Todo en la vida es aprendizaje.

Cuando vivimos en modo automático, sin apreciar cada momento, es cuando tenemos la necesidad de aprender de las situaciones de la vida, de tomarlas como enseñanzas, como espacios de aprendizaje.
Es momento de tomar conciencia de nuestras vivencias, lo que nos aportan, los desafíos a los que nos enfrentamos, las preguntas que nos surgen, de las sensaciones y sentimientos que estamos experimentando.
Aprovechemos para extraer el fruto de los momentos que vivimos, de los procesos de cambio, de los encuentros, de las pérdidas, confusiones y crecimientos que se viven, no debemos dar poder a la tentación de pasar ese momento por encima, aprovecha para atarlo el tiempo suficiente a la percepción como para sacar el máximo partido. Toda lección sirve de aprendizaje.
Pregúntate ¿Para qué? en vez de ¿Por qué?.  Escribe en papel la situación para observar mejor sus pros y contras. Habla con aquellos que merecen tu confianza y comparte tu experiencia, tus sentimientos con ellos. 
Trabaja en ti mismo para reconocer, para abrir, para descubrir. Se aprendiz de cada vivencia porque una vez que nuestra experiencia nos ha enseñado todo lo que necesitamos saber, lo podremos soltar y se irá a su tiempo dejando los aprendizajes necesarios.
@mundopositivo11:11
Emily del Olmo

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